Los municipios de la Provincia de Buenos Aires tendrán que adoptar las medidas necesarias para que el uso de agroquímicos no afecte a la salud de las personas.
La resolución surge por iniciativa de la abogada Graciela Gómez, luego de que ocurriera un caso de leucemia en un menor por el veneno arrojado desde un avión fumigador.
Los municipios deberán formular una planificación de su territorio, observar la aplicación aérea y terrestre de los agroquímicos, e incluir los estudios de rigor científico sobre el impacto en la salud humana que produciría la aplicación de agroquímicos en cultivos. Actualmente, la Defensoria del Pueblo de la Argentina se propone revisar la clasificación de agroquímicos, lograr que se controlen los residuos de los plaguicidas y establecer un plan de gestión de los envases de agroquímicos. Además, considera que la actividad productiva de la provincia tiene un gran aumento en la utilización de agroquímicos y fertilizantes lo que ha generado fuertes
impactos sociales, ambientales y económicos.