El Río de la Plata y sus principales efluentes, los ríos Paraná y Uruguay, conforman una cuenca cuyas aguas surcan Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia.
En esta área, la construcción de represas hidroeléctricas ha alterado la fisonomía de enormes áreas. Por ejemplo, el Dique de Itaipú inundó más de 100 mil hectáreas de tierras fértiles, destruyendo valiosos hábitats naturales.
El panorama futuro es preocupante ya que en los próximos años se planea construir en esta cuenca un total de 27 represas, seis de las cuales ya se encuentran en construcción. Por otra parte, el proyecto de la Hidrovía , que aumentaría la navegabilidad entre los cinco países, carece de un análisis de impacto ambiental responsable que lo sustente, y la contaminación de las aguas aumenta progresivamente sin que los gobiernos actúen con eficacia para evitarlo.
Victoria Bianco
Periodista especializada en medio ambiente