No es imprescindible utilizar el coche para realizar todos nuestros desplazamientos. En los pequeños trayectos podemos ir a pie.
Utiliza el transporte público en vez del coche particular siempre que pueda. Este precisa por viajero transportado 50 veces menos espacio y consume 15 veces menos energía.
Si no podes utilizar el transporte público para ir a tu lugar de trabajo, compartí el coche con más personas. Por cada individuo que comparta tu coche para ir al trabajo, se ahorran más de 1.000 litros de combustible al año.